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Vinificación de Vinos Tintos
Durante el proceso de Vinificación de los vinos tintos la uva pasa por distintas etapas:
- Maceración
- Fermentación alcohólica
- Remontaje
- Fermentación maloláctica
- Crianza
Terminada la cosecha, llega la uva a la bodega y pasa por una cinta de selección donde se descartan los racimos que no están en condiciones.
Luego pasa por la despalilladora, que separará el racimo de los granos y a la vez estrujará apenas las uvas.
La uva estrujada será llevada a un tanque de acero, donde pasará un periodo corto de maceración a baja temperatura, lo que ayudará a la extracción de aromas.
En esta etapa se agrega levadura y se sube la temperatura por encima de 25 grados, dejando que ocurra la fermentación alcohólica por 7 a 10 días. En dicho proceso, la levadura comerá el azúcar disponible en la uva y lo transformará en alcohol y dióxido de carbono.
Terminada la fermentación alcohólica, se sigue un proceso de maceración que puede durar hasta 30 días, donde se siguen extrayendo color, aroma, sabores y taninos de las pieles.
Durante esta etapa se realiza un proceso denominado remontaje. Las pieles de las uvas, siendo más livianas que el líquido, formarán una capa en la superficie llamada sombrero. A dicho sombrero habrá que ir bajándolo y moviéndolo para extraer de forma más pareja. El remontaje consiste en sacar el vino y pasarlo a otro recipiente para que el sombrero baje, y volver a llenarlo por la parte superior con el vino que se retiró.
Una vez finalizado este proceso se regresará a la fermentación maloláctica. A través del agregado de bacterias bacillus se transformarán ácidos málicos en ácidos lácticos. Dicho proceso favorece a suavizar la sensación ácida agresiva y contribuye a una textura más cremosa.
Pasando la fermentación maloláctica el vino está listo para ir a una botella o criarse en barricas de madera por un tiempo determinado. Luego de terminada la crianza, el vino deberá ser filtrado y estabilizado para luego ser embotellado. Será elección de la bodega hacer una segunda crianza del vino en la botella antes de ser comercializado.
Elige tu vino, elige tu aventura. Salud!
Te invitamos a descubrir el mundo del vino. Desde el proceso de cultivo de la vid, hasta las características propias de cada tipo de uva. Continúa aprendiendo con Vinoteca.
Maridaje de Vinos de Postre
Tips de maridaje para vinos dulces o de postre, tales como cosecha tardía, oporto (fortificados) o sauternes (botritizados)
Aprende como maridar los siguientes tipos de postres:
- Postres cítricos
- Postres a base de berries
- Postres frutales
- Postres a base de fruta de carozo
- Postres con miel, vainilla o especias
- Postres con frutos secos
- Postres a base de chocolate, café o caramelo
¡Conoce los vinos que maridan a la perfección!
Postres a base de fruta cítrica o tropical quedan a la perfección con cosechas tardías o algunos espumosos dulces.
Si el vino dulce tiene paso por madera, es bueno que algunos de los ingredientes del postre sea la vainilla, el caramel o alguna especia dulce como la canela o el clavo.
Los postres con base de berries maridan bien con vinos fortificados tintos y algunas cosechas tardías.
Si los berries son parte de un postre frutal o con delicadeza, acompañarán mejor vinos de cosecha tardía o botritizados. Mientras que si los berries son parte del postre de chocolate o café, el oporto será su aliado principal.
Si los postres son a base de fruta de carozo como la manzana, la pera o el melocotón, maridan bien con cosechas tardías, vinos botritizados y fortificados blancos, como un Cream Sherry o Madeira.
Postres con miel, vainilla o especias como el azafrán, quedan a la perfección con vinos botritizados por su complejidad aromática.
Postres con frutos secos, tales como nueces o almendras, son acompañados de maravilla con fortificados de crianza oxidativa, como los oporto estilo Tawny o Cream Sherry. También los vinos pasificados italianos pueden ser grandes aliados.
Cuando los postres son a base de chocolate, café o salsa caramel, lo mejor es el acompañamiento con el vino fortificado tinto que pueden equilibrar la intensidad de los ingredientes. Evite emparejarlos con cosechas tardías muy simples, ya que el vino pasará desapercibido.
Elige tu vino con el corazón contento. Salud.
Te invitamos a descubrir el mundo del vino. Desde el proceso de cultivo de la vid, hasta las características propias de cada tipo de uva. Continúa aprendiendo con Vinoteca.
Maridaje de Vinos Espumantes
Tips de maridaje para vinos espumantes tales como Prosecco, Cava y Champagne:
Las burbujas sirven para contrarrestar los alimentos muy salados, algunas preparaciones picantes, frituras y texturas muy grasosas o cremosas.
Un vino espumante puede acompañar a la perfección con pescados y mariscos. También acompaña muy bien la comida caribeña que utiliza frutas en sus preparaciones.
Por otro lado, maridan de maravillas con quesos de pasta dura e intensos en sabor, tales como el parmesano o el cremoso Saint-André.
La textura de las burbujas de los espumantes hace que sean ideales para emparejar con comidas crujientes como preparaciones con masa filo de Medio Oriente, pollos fritos o cualquier tipo de tempura.
Los espumosos de nuevo mundo (Estados Unidos, Argentina, Australia), de fruta más madura, acompañan a la perfección platos con algo de azúcar en sus recetas.
Un vino espumante siempre es un gran aliado para preparaciones o ingredientes difíciles de maridar tales como la sopa de vegetales o los huevos.
Las burbujas cremosas del método champenoise, por su parte, sirven bien con comidas de textura rústica, como la polenta, el pesto, el hummus y el babaganoush.
Por último, estas son algunas combinaciones que no recomendamos:
- Evite beber espumantes con comidas extremas, mucha intensidad o mucho picante arruinaran la delicadeza de sus burbujas.
- Salvo que el espumante sea dulce, evite compartirlo con postres o comidas con mucha azúcar.
- Evite servir vegetales de carácter amargo como el brócoli, el radicchio, los espárragos o la alcachofa, ya que le otorgan un sabor metálico al vino espumante.
- No lo maride nunca con carnes rojas intensas, las carnes pueden sobrepasar al espumante muy fácilmente.
Elige tu vino con el corazón contento. Salud.
Tips para elegir un alimento según el vino
Guía de maridaje
Cuando el vino contiene alta acidez, elige alimentos que sean intentos, de texturas cremosas, con alto contenido graso o bien salados, para contrarrestar el vino.
Puedes equiparar con alimentos que tengan mucha acidez, tales como los cebiches o escabeches.
Si el vino es ligeramente dulce, sírvelo con alimentos con pequeñas dosis de azúcar, como una salsa de naranja, o con alimentos picantes.
Si el vino es muy dulce, sírvelo con postres que sean menos dulces que el vino. Intenta contrastarlo con algunos alimentos algo salados, como quesos o preparaciones asiáticas a base de salsa de soja.
Cuando el vino tinto es tánico, elige alimentos ricos en proteína o grasa. Evita servir alimentos muy magros o picantes, ya que alteran negativamente a los taninos. Puedes utilizar pimienta recién molida para desviar y aplacar el efecto de taninos elevados.
Cuando el vino tiene envejecimiento en roble, elige alimentos y preparaciones suculentas, ricas en proteínas y con fondos intensos. Elige ingredientes como nueces y almendras, y especias dulces como la canela y el clavo de olor. Puedes utilizar métodos de cocción que ahumen las proteínas como asar a las brasas o ahumar.
Cuando el vino es añejo puedes utilizar carnes de caza para sumar aromas delicados y complejos a la combinación. Elige aves de carne roja como el pato, codorniz o perdiz para acompañar vinos tintos añejos.
También puedes elegir alimentos que no sean más intensos que la delicadeza de los vinos añejos. Adicionalmente, puedes compensar la pérdida de acidez del vino añejo con una buena acidez en el alimento o en la preparación.
Elige tu vino con el corazón contento. Salud.
Tips para elegir un vino según el alimento
Guía de maridaje
Cuando la comida es ácida, sirve vinos con igual o mayor acidez. Trata de evitar vinos tintos, salvo que sean de gran acidez, como Pinot Noir, Sangiovese o Nebbiolo. Considera Espumantes y Rosados secos como una buena alternativa.
Cuando la comida es salada elige vinos de bajo alcohol. Idealmente entre 10° y 12.5°, ya que la sal incrementará la sensación cálida proveniente del alcohol. Juega con vinos con algo de dulzor y fructosidad, de países como Australia y Estados Unidos. Evita vinos que hayan sido elaborados con madera o que contienen mucho tanino.
Cuando la comida es picante o especiada, selecciona vinos jóvenes, de alcoholes moderados, sin paso por madera, y si es posible con algo de dulzor para apagar el fuego del picante. Lo que mejor funciona son rosados y blancos con algo de azúcar residual, vinos denominados Off Dry. Si el picor es muy alto, evita el vino y acompaña con una cerveza estilo lager.
Para comidas con amargor selecciona vinos con paso por madera y con buena carga tánica. Puedes probar con vinos de gran acidez, como el Borgoña, el Barolo y el Riesling, aunque no siempre funciona esta regla.
Para comidas con algo de azúcar, típicas de la cocina asiática, intenta con vinos Off Dry, como Riesling o Chenin Blanc. En su defecto, puedes probar con Sake. Si prefieres vinos secos, sirve algo jóven y fresco, ciertos vinos con crianza en madera de origen americano pueden funcionar de maravilla.
Elige tu vino, elige tu aventura. Salud!
Tempranillo
El Tempranillo es la variedad originaria del norte de España, que bajo distintos nombres representa los vinos más emblemáticos del país. Se la llama cencibel, tinta de toro, tinto fino, Ull de liebre y tinta del país.
Acidez del Vino
La acidez es el concepto que describe la sensación fresca y ácida producida por los ácidos orgánicos presentes en la uva y el vino.
Aromas Terciarios del Vino
Los aromas terciarios son aquellos que se desprenden del vino por haberse guardado y reposado dentro de su botella por un periodo de al menos 10 años antes de ser consumidos. Hay variedades que desarrollan estos aromas un poco antes, y algunas que tardan aún más en hacerlo.
Aromas Secundarios del Vino
Los aromas secundarios del vino son aquellos que se volatilizan en cualquier parte del proceso de producción.
Las más importantes, y las que tienen mayor impacto sobre el vino, son:
- Fermentación alcohólica
- Fermentación maloláctica
- Crianza en barricas de madera
La fermentación alcohólica: los aromas primarios pueden afirmarse o volatilizarse según las temperaturas a las cuales se fermenta el vino. Este proceso puede realzar los aromas primarios o cambiar el rumbo hacia algo más neutro.
La fermentación maloláctica: en este proceso se desprenden los aromas típicos a mantequilla y nata del chardonnay y otras variedades blancas.
La crianza en barricas de madera: se desprenden aromas típicos como vainilla y coco dependiendo del origen del roble. La canela y el tabaco son propios de las variedades tintas, mientras que el pan tostado, la miel y los aromas de fruta asada caracterizan las variedades blancas. Por último, el aroma tostado proveniente de las barricas puede estar presente en todas las variedades.
Dichos aromas luego se transformaran en aromas terciarios con el envejecimiento en botella y la interacción, a través del corcho, con el oxígeno.
¡Conoce más sobre los aromas primarios y terciarios del vino!
Te invitamos a descubrir el mundo del vino. Desde el proceso de cultivo de la vid, hasta las características propias de cada tipo de uva. Continúa aprendiendo con Vinoteca.